En el primer semestre del presente año han sido más de 17.000 jóvenes los que han solicitado entrar a formar parte de las Fuerzas Armadas, una cifra que no llega a cumplir las 18.900 plazas publicadas.

En la primera convocaoria, 7.021 solicitantes optaron a 5.500 plazas; en la segunda, las solicitudes bajaron hasta 5.636, cuando las plazas disponibles eran 5.900; mientras que en esta tecera se han presentado los mencionados 4.500 candidatos para 7.500 vacantes.

Fuentes militares consultadas por esta agencia estiman que las solicitudes para soldado profesional rondarán las 25.000 al finalizar el año, algo que consideran un "éxito" en materia de reclutamiento.

El objetivo de las Fuerzas Armadas, marcado por el Gobiero y el Parlamento en el proceso de profesionalización tras el fin del servicio militar obligatorio, es alcanzar los 102.000 efectivos a finales de 2002. Para finales de este año se debería alcanzar ya esa cifra, pero incluyendo a los 10.000 soldados de reemplazo que aún permanecen en el Ejército. Según datos oficiales del mes de junio de este año, la tropa está compuesta por 78.000 soldados, más los citados 10.000 de reemplazo.

Las fuentes consultadas indican que el problema para alcanzar esos objetivs no se encuentra en el reclutamiento, que continúa a buen ritmo, sino en la permanencia de los soldados profesionales que terminan su compromiso, y que en muchos casos deciden no renovarlo.

Durante el año 2000, se produjo un incremento neto de 10.358 militares profesionales de tropa y marinería, finalizando el año con 76.126 efectivos, según datos aportados recientemente por el ministro de Defensa, Federico Trillo, ante la dirección del Partido Popular. Sin embargo, el índice de renovaciones de comprmiso descendió desde el 84% del año 1999 al 78% del año 2000.