ELECCIONES 93.- La semana electoral del PP ------------------------------------------

- Hormaechea amenaza con presentarse en solitario por Cantabria

- Aznar propone un Código Etico que expulse a los que utilicen su puesto en beneficio particular

MADRID
SERVIMEDIA

El Partido Popular inició la semana con el optimismo de unos sondeos que le concedieron la primera diferencia importante sobre el Partido Socialista. "Hemos pasado de quimera a partido ganador", dijo José María Aznar, mientras calentaba la pre campaña acusando al PSOE de "usar los resortes del Estado" en beneficio propio y para desacreditar al PP.

En los dos mítines que siguieron al de Aranda de Duero -Elche el miércoles y Cuenca el jueves-, Aznar prometió mantene las pensiones ("son un derecho, no algo que se pueda ofrecer de forma despreciable como mensaje electoral", dijo en Cuenca) y potenciar las Pymes, "que son las que están creando riqueza ahora".

Aznar presentó el jueves en Madrid a la emblemática candidatura de Madrid, encabezada al Congreso por él mismo, con Rodrigo Rato como número dos y el ex centrista Rodolfo Marín Villa en el tres.

Entre las nuevas incorporaciones descataron también Rafael Arias Salgado, que dejó el CDS a finales del año pasdo para incorporarse a las filas del PP; Carlos Aragonés, ex vicepresidente de la Juventudes del CDS y director del Gabinete de Aznar en su etapa de jefe del Ejecutivo de Castilla y León, y Juan Carlos Vera, secretario de Organización del partido.

Aznar, que durante la semana ha llevado allí donde ha hablado la bandera de la anti corrupción, presentó hoy en Madrid, ante sus "número uno", un código ético para "recuperar la moral y la ética públicas".

El PP expulsará "de inmediato" a todo militanteque emplee el partido de soporte para obtener beneficio propio, según aprobó el pasado XI Congreso del partido. El documento recoge también el "compromiso democrático y ético para recuperar la vida pública".

"No pretendemos dar lecciones de ética a nadie", dijo el candidato popular, pero insistió Aznar en que su finalidad es "frenar en seco" la corrupción en el partido.

HORMAECHEA AMENAZA TORMENTA

Pero mientras el secretario general del PP, Francisco Alvarez Cascos, calificaba el viernes de "prsagio del síndrome de división" las declaraciones de González en las que vaticinaba la "inestabilidad del próximo Ejecutivo", el presidente cántabro, Juan Hormaechea, amenazaba tormenta en Cantabria.

Poco antes de la medianoche del viernes al sábado, Hormaechea daba de alta a su formación (Unión para el Progreso de Cantabria) en la Junta Electoral Central y emenazaba con presentarse a los comicios del 6 de junio independientemente del PP.

Según una encuesta encargada por él mismo, la UPCA obtendra en Cantabria el 30,8 por ciento de los votos, a tan sólo dos décimas de la candidata del PSOE, la ministra Matilde Fernández (31 por ciento).

El Partido Popular se quedaría entonces tan sólo con el 12 por ciento y de confirmarse dicha consulta, la UPCA tendría 2 diputados, el PSOE otros 2 y el PP 1.

La decisión de Hormaechea ha cogido desprevenidos a los dirigentes del PP en Cantabria y su presidente, José Luis Vallines, se ha negado a hacer valoraciones hasta que Hormaechea haga pública su decsión.

"QUIERO UNA ESPAÑA ACTIVA"

Aznar dijo que mantendrá las pensiones y ayudará a las Pymes y trabajadores por cuenta ajena, pero afirmó también que no quiere una España "que se enriquece fácilmente sino que es activa y que trabaja".

El candidato popular no mencionó en sus actos de pre campaña a Felipe González, pero sí arremetió contra el Gobierno socialista en conjunto. "No creáis a esos predicadores de la falsedad y sembradores del miedo, que juegan al oportunismo por un voto", dijo Aznar oy en Madrid ante sus cabezas de lista.

Las acusaciones al PSOE no se ciñeron a su Gobierno y Rodrigo Rato, portavoz popular en el Congreso hasta la disolución de las Cámaras, llegó a decir: "me temo que (los socialistas) no van a respetar las reglas del juego y no sé si llegaremos a los pinchazos telefónicos y los dossieres (...). Ya sabemos como se las gastan y la desesperación es mala consejera".

Preguntado sobre su patrimonio, Felipe González dijo a la prensa que disponía en el banco de 28 ó 9 millones, aunque tenía que pagar créditos. Aznar declaró entonces a los medios que González le "barría". "Dudo mucho que tenga disponible en metálico un millón de pesetas; pagué una barbaridad de impuesto sobre la renta el año pasado. Aunque no estoy seguro, estoy dispuesto a preguntárselo a mi mujer (Ana Botella) y dar cifras", dijo.

(SERVIMEDIA)
25 Abr 1993
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