"Creo que ha primado el mal llamado voto útil y, en consecuencia, esa lucha de mi partido por alertar del peligro del bipartidismo ciertamente no ha tenido eleco deseado. Han colaborado muy poco en esto el resto de los partidos minoritarios y tengo que decir que en esa lucha prácticamente hemos estado solos", manifestó.

"Gran parte de los electores", añadió, "esa parte que no ha hecho un voto reflexivo, sino un voto visceral, anti-algo, dentro de poco, cuando vean posiblemente el bloqueo en el que entre el país en algunas cosas, yo creo que van a darse cuenta del error. Pero hay que admitir que el pueblo español es soberano y nosotros lo aceptamos a pies jntillas".

Los votos obtenidos por el CDS (1.200.000 menos que en 1989) "nos dan una potencialidad importante, más allá de los 400.000 votos", señaló Gómez-Calcerrada.

El secretario general del CDS justificó su opinión en que en sus viajes por el país "ha habido, especialmente en los últimos días, cantidad de gente que ha sido muy receptiva a nuestro mensaje, pero que nos ha dicho que en estas elecciones lo importante era, o desalojar a unos o impedir el paso a otros".

Gómez-Calcerrada insistó en que "en circunstancias normales, un partido de centro tiene electorado y sentido en nuestro país". El líder centrista anunció que reforzarán la vigilancia en el recuento de las papeletas "mesa por mesa" en Madrid, donde estuvieron a punto de conseguir su primer escaño.