Así lo señaló Gonzalo en una rueda de prensa con motivo de la presentación de los resultados de Enagás en 2023, año en que redujo sus ganancias un 8,8%.

Enagás, que prevé invertir en hidrógeno 3.200 millones hasta 2030, centrará su estrategia en proyectos para la seguridad de suministro y la descarbonización en España y Europa.

En consecuencia, según afirmó Gonzalo, se plantea desinversiones fuera de Europa ya que “los activos en América no son estratégicos a largo plazo para la compañía” a diferencia de los situados en Europa, aunque defendió que decidiera “buscar oportunidades de crecimiento internacional donde eran más atractivas” para poder compensar la caída de ingresos regulados.

Sobre el ajuste de la política de dividendo entre 2024 y 2026 para hacer frente a las inversiones en hidrógeno, mostró su confianza de que no afecte muy negativamente a la acción ya que defendió que Enagás cuenta con “un respaldo sólido” a su proyecto de futuro.

“Estamos tomando decisiones muy prudentes para ayudar al futuro a largo plazo de la compañía y al mismo tiempo mantiene un dividendo competitivo”, sostuvo Gonzalo, quien apostilló que “estamos asegurando el futuro a largo plazo”.

En esta línea, añadió que “es una apuesta de futuro que tenemos que acometer porque es nuestra responsabilidad” y apuntó que Enagás presentará la actualización de su plan estratégico a 2030 durante el año 2024, cuando se conozcan algunos elementos clave como la actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec).

Para Enagás, 2023 fue un año clave en el avance del calendario del hidrógeno, con hitos como la inclusión de H2Med y de la Infraestructura española de hidrógeno en la lista europea de Proyectos de Interés Común (PCI). Además, En diciembre fue designado gestor provisional de la red troncal de hidrógeno (HTNO), en España.

Entre los próximos hitos, deberá remitir a la Dirección General de Política Energética y Minas, en un plazo de cuatro meses (antes del 29 de abril), una propuesta de desarrollo de la infraestructura troncal de hidrógeno española no vinculante con un horizonte de diez años. Este será el primer paso para el desarrollo de una Planificación vinculante por parte del Gobierno de España.