La nueva planta será gestionada por la empresa energética ScottishPower y se situará en la localidad de Whitelee, al sur de Glasgow. La instalación tendrá un coste de 430 millones de euros,contará con 140 turbinas y su potencia será de 322 megavatios, lo que permitirá abastecer 200.000 hogares cuando entre en pleno funcionamiento, en el año 2009.

Para garantizar la seguridad del tráfico aéreo en la zona, ScottishPower también construirá una torre de radar en una nueva ubicación, ya que la planta generará interferencias a la que actualmente regula el tráfico del cercano aeropuerto de Glasgow. El público podrá visitar la planta, que dispondrá de carril-bici y víaspara practicar senderismo.

Según Allan Wilson, ministro de Industria de Escocia, la instalación permitirá reducir en 650.000 toneladas las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera anualmente, y cubrirá más del 2% de las necesidades energéticas de la región.

Escocia se propone producir un 18% de la energía eléctrica a partir de fuentes renovables en 2010, y un 40% en 2020, contribuyendo así al cumplimiento del objetivo del Ejecutivo de Tony Blair, de que un 10% de la energía eléctrica generada en todo el páis proceda de fuentes renovables en esa fecha.

Reino Unido cuenta con un total de 125 plantas de energía eólica que actualmente generan un 1% de la electricidad producida en el país.