Armengol y Fontana lo decidieron así en un encuentro previo a la reunión de finales de abril en Palma donde el Congreso español será anfitrión de la Conferencia de Presidentes de Parlamentos de la Unión Europea, según informó la Cámara Baja.

Ambos presidentes acordaron reunir el próximo septiembre en España el Foro parlamentario entre ambos países, cuyo última cumbre fue en 2013, con el objetivo de abordar estrategias conjuntas para garantizar la estabilidad de la región mediterránea, establecer políticas que favorezcan el desarrollo de los países, reforzar el compromiso europeo con la zona como lugar de enlace cultural y comercial entre Europa, África y Asia, e incentivar los trabajos para reducir la contaminación del mar.

Los dos dirigentes, según informó la Presidencia del Congreso español, coincidieron además en la importancia de las relaciones institucionales y la obligación de los parlamentos de vencer la polarización política a través del diálogo con el fin de encontrar soluciones conjuntas a los problemas de la ciudadanía.

La presidenta del Congreso, también presidenta de turno de la Asamblea Parlamentaria de la Unión por el Mediterráneo, aprovechó la estancia y visitó la nueva sede de esta organización que aglutina a más de 40 países y que estará ubicada en Roma.