Según informó la abogada de Pikabea, Jone Goiricelaia, el magistrado atribuye al etarra, extraditado el pasado martes desde Francia, ser autor de un delito de detención ilegal y de otro de asesinato, motivo por el cual hoy le notificó el auto de procesaiento que había dictado contra él por estos hechos.

En concreto, Garzón atribuye a Pikabea haber participado en el asesinato de Arturo Quintanilla Salas, dueño del bar "José Mari" de Hernani, acción perpetrada el 5 de septiembre de 1983. Asimismo, le implica en el secuestro del dueño de un vehículo que fue utilizado para cometer este atentado.

Durante la declaración indagatoria prestada hoy por el etarra ante el juez, Pikabea negó su participación en esos hechos, alegando que padece desde los 17 ños una diabetes que le impide hacer una vida normal y, por tanto, realizar acciones de ese tipo.

Tras la declaración de Pikabea, el fiscal pidió el ingreso en prisión del etarra, mientras que su defensa solicitó la libertad. Asimismo, tanto el juez como el fiscal y los abogados apoyaron que Pikabea, que fue trasladado a la cárcel de Carabanchel, reciba en dicho centro penitenciario las atenciones necesarias para garantizar su calidad de vida, de acuerdo con su enfermedad, motivo por el cual será trasadado a la enfermería de la prisión, donde quedará en situación de aislamiento.

Durante la declaración, el magistrado, sin embargo, no preguntó al etarra extraditado desde Francia sobre su pertenencia a la organización terrorista ETA, dado que ya ha sido juzgado por esos hechos, según dijo su abogada.

Igualmente, la letrada indicó que el etarra sólo ha sido preguntado por esta acción terrorista, dado que el decreto de su extradición desde Francia sólo fue acordado por su participación en estos hehos.

No obstante, al parecer, el etarra también está implicado en otro asesinato perpetrado en Ordizia, cuya causa instruye el juez Javier Gómez de Liaño, quien podría tomarle declaración sobre estos hechos.