Fuentes de la lucha antiterrorista indicaron a Servimedia que el etarra no tenía causas pendientes con la Justicia española, aunque en su vehículo se encontraron pistolas, armas y matrículas falsas, de lo que se deducía su actual vinculación con la organización criminal.

El accidente en el que falleció este miembro de ETA se produjo cuando el terrorista intentó evitar un control de tráfico e iba a ser identificado por la Policía francesa. Fue en ese momento cuando el sospechoso trató de huir mediante una brusca maniobra y perdió el control de su vehículo.

Como consecuencia del incidente, el etarra resultó herido de gravedad y tuvo que ser trasladado a un hospital cercano, donde quedó ingresado y donde más fallecería más tarde como consecuencia de las lesiones sufridas.

El encontronazo de este etarra con las Fuerzas de Seguridad gala tuvo lugar hacia las 16,00 horas a la altura de la localidad francesa de Flaugnac, a 25 kilómetros al sur de Cahors y a 400 del paso fronterizo de Irún.

En el coche de Gómez González, un Volkswagen robado, se localizaron dos pistolas, matrículas falsas y abundante documentación que vinculaban al fallecido con ETA.