Por 352 votos a favor, 172 en contra y 7 abstenciones, el Parlamento Europeo aprobó en primera lectura la propuesta sobre información y consulta a empleados.

El objetivo de la propuesta del Ejecutivo europeo es garantizar la existencia, en todos los Estados, de un derecho de información y consulta regular de los trabajadores sobre la evolución económica y estratégica de la empresa y de las decisiones que les afectan.

En última instancia se persigu conseguir un clima de confianza entre las partes para hacer posible un entorno de flexibilidad de la organizazión laboral, pero en un marco de seguridad. Al no haber sido posible un acuerdo entre los interlocutores sociales a escala europea, la Comisión recurrió a presentar esta directiva, que cuenta con el beneplácito de la Eurocámara.

La Comisión propone aplicar esta directiva a todas las empresas comunitarias que empleen más de 50 personas, aunque se permite a los Estados miembros elevar este númeo a 100, si lo creen adecuado. Con esta última propuesta la Eurocámara no se ha mostrado de acuerdo.