La Expo actúa únicamente como mediadora entre los emigrantes y los pabellones y empresas presentes en este acontecimiento que no encuentran profesionales cualificados para cubrir algunos puestos de trabajo.

Los requisitos exigidos para acogerse a este programa son residir o haber residido fuera de España, dominar un segundo idioma además del castellano y tener alguna formación o cualificación específica.

Los puestos ofrecidos van esde la hostelería y restauración hasta vigilancia y seguridad, pasando por azafatas y guías, cajeros, taquilleros, dependientes y telefonistas, con el denomimador común de tener que mantener contacto con el público.

El programa responde, según fuentes de la Expo consultadas por Servimedia, a la conveniencia de tomar medidas "ante los problemas que pudiesen surgir para encontrar personal que dominase idiomas", así como a favorecer al colectivo de emigrantes.

La iniciativa ha sido llevada adelantepor la Sociedad Estatal de la Expo, en colaboración con el Instituto Español de Emigración, el Ministerio de Trabajo y los sindicatos UGT y CCOO.

En relación con la participación de las dos centrales mayoritarias, el sindicato CSI-CSIF ha dirigido una carta de protesta al presidente de la Sociedad Estatal en el que critica la exclusión de las demás organizaciones sindicales.

En esa carta, remitida a los medios de comunicación, CSIF, afirma: "No queremos imaginar que a los posibles interesados se es exija la militancia previa o el carné de estos dos sindicatos, pero, en todo caso, nos parece arbitrario que entre el abanico de organizaciones sindicales legales en España, solamente estas dos hayan sido elegidas".

NO HAY FAVORITIMOS

A este respecto, el responsable del programa, Manuel Nuñez, manifestó a Servimedia que la contratación de emigrantes se realiza en función de los requisitos de cualificación profesional establecidos en el programa y en ningún caso por la afiliación sindical de los slicitantes.

Nuñez aseguró que se ha dirigido a UGT y CCOO porque son los sindicatos más representativos en la Expo y recalcó que sería imposible imponer afiliados de las centrales mayoritarias a las empresas contratantes.

Añadió que las ofertas de trabajo han sido remitidas a más de 3.000 direcciones en el extranjero, en su mayoría embajadas y consulados, "y de las cuales ninguna que yo sepa son de Comisiones o de UGT".