En declaraciones en los pasillos del Congreso, Mayor Oreja afirmó que la posición en contra de la tramitación con carácter urgente de la norma "no es de una persona ni de un departamento", sino del Gobierno, que tiene "no solo el derecho, sino el deber de emitir una posición".

El titular de Interior insistió reiteradamente en que "se trata de una reflexión del Gobierno y, evidentemente, a quien le corresponde hacer es al ministro del Interior por raznes obvias".

A su juicio, la nueva Ley de Extranjería necesita una "reflexión profunda" porque "la inmigración va a ser el elemento más importante de la conviencia entre españoles en los proximos años y décadas".

Mayor Oreja apeló al sentido común a todos los grupos parlamentarios para seguir "trabajando en el acuerdo y consenso" de una norma que "es transcendental para la convivencia de los españoles".

En este punto, afirmó que para el Ejecutivo en estos momentos "lo más cómodo sería callare, pero no tenemos que pensar en este Gobierno ni en el siguiente, sino en los siguientes, y no tenemos que pensar en términos de partido, sino de sociedad".

Preguntado por la situación de la localidad valenciana Los Pedriches, comprada por un grupo de neonazis británicos, el titular de Interior confió en la investigación abierta por las Fuerzas de Seguridad del Estado y "hoy por hoy, no hay otro factor de singular preocupación por parte del Gobierno".