En esos ocho meses, señalan las estadísticas del Gobierno, se ha pasado deun saldo negativo en enero de 17.966 millones de pesetas entre las compras y ventas de títulos en bolsa por inversores extranjeros, a otro favorable en agosto de 36.581 millones de pesetas.

El punto de inflexión se detecta a partir del pasado mes de julio, que por primera vez en lo que va de año registraba un saldo positivo entre ventas y compras de acciones por extranjeros, de 19.667 millones de pesetas, haciendo pasar el acumulado del año de unos "números rojos" de 9.182 millones a otros "negros" de10.485 millones.

Estas cifras señalan que la entrada de capital extranjero en España se está haciendo de forma sensible, no sólo mediante la inversión directa en empresas, coticen o no en bolsa, sino también a través de la compra de acciones negociables en los mercados nacionales.

Hasta agosto, las compras de acciones en bolsa por extranjeros superaban los 300.000 millones de pesetas y se situaban por encima de los 2,4 billones de pesetas, cuando en las mismas fechas del 93 se situaba en 1,9 billnes.