Fedepe, que agrupa a cerca de 26.000 mujeres empresarias, directivas y profesionales de múltiples sectores empresariales y de la administración pública, reclamó en un comunicado que la RFEF adopte "medidas inmediatas y contundentes para salvaguardar los derechos de las jugadoras", así como "cualquier conducta que menoscabe la dignidad de las mujeres, especialmente en un ámbito tan relevante como el deporte".

Además, instó al Consejo Superior de Deportes a que inicie la "inhabilitación" de Luis Rubiales como presidente de la RFEF "ante su nula voluntad de dimitir, y en coherencia al compromiso social con la igualdad de género en el marco deportivo".

"Exigimos a la Real Federación Española de Fútbol que tome medidas inmediatas y contundentes para salvaguardar los derechos de las jugadoras y asegurar la implementación de protocolos que erradiquen cualquier forma de acoso, discriminación o abuso", dijo.

Aseguró que "nuestra selección nacional, merecedora de ser campeona del mundo, debe ser representada por figuras que encarnen los principios de igualdad y respeto en todos los contextos". En este sentido, celebró "la reacción

generalizada de la opinión pública que ha condenado esta muestra de sexismo y discriminación inadmisible" por parte de Rubiales.

Además, hizo un llamamiento al Consejo Superior de Deportes para que, dentro de sus atribuciones, "promueva activamente la prevención y la acción contra el acoso, el machismo y el sexismo en el ámbito deportivo", al entender que lo hecho por Rubiales "no es una cuestión puntual" sino "la muestra de un problema estructural de la sociedad y, por tanto, merece un tratamiento colectivo".

Fedepe ensalzó, finalmente, "la ejemplar gestión del asunto por parte de Jennifer Hermoso, así como de sus compañeras de equipo, al canalizar su interlocución desde una entidad colectiva como es el sindicato/asociación FutPro al que pertenecen".