“Los pensionistas no son culpables de que el Gobierno no tenga ni mayoría ni proyecto para gobernar, ni de que el Gobierno actual sea un Gobierno inviable”, afirmó en la clausura el Congreso por el XXX Aniversario de la Unión Europea de Mayores, celebrado en Ciudad Real.

La Ley General de la Seguridad Social ya contempla en su artículo 58 que las pensiones contributivas “se revalorizarán al comienzo de cada año en el porcentaje equivalente” a la inflación anual.

Aun así, Feijóo quiere llevar una iniciativa al Congreso para dejar ese compromiso expresamente respaldado por las Cortes y convertirlo en una bandera política propia frente al Gobierno, en plena estrategia por captar el voto de las clases medias.

La iniciativa, de salir adelante, permitiría también a los populares prevenir un nuevo decreto ‘ómnibus’ que, además de recoger la revalorización de las pensiones, incluya cuestiones peliagudas para los populares, como el traspaso al PNV de un palacete en París valorado en 15 millones de euros que acabaron avalando con su voto por no tumbar la actualización de las pensiones.

Durante su alocución, Feijóo defendió que los gestores públicos deben “articular fórmulas que garanticen el bienestar de todos” y asegurar “la recompensa” de “quien ha contribuido toda su vida al progreso y al bienestar de una nación”. Pero lamentó que el debate político en España esté a “otras cosas”, pendiente de “la inestabilidad del Gobierno de turno” que, al no ser capaz de aprobar unas cuentas públicas, condena al país a que “todo se pare”.

“Ni el Gobierno debe tener las manos libres para mover miles y miles de millones de euros del Presupuesto del Estado, ni los ciudadanos deben de ser víctimas de la irresponsabilidad de un Gobierno que no aprueba las cuentas y que gasta exclusivamente de acuerdo con su interés político, pero sin el control fundamental de una democracia, como es la aprobación de cuentas en Cortes Generales”, añadió Feijóo, quien insistió así en la necesidad de aprobar una reforma para “impedir que el Gobierno siga abusando de la prórroga presupuestaria”.

MENSAJE A LOS JÓVENES

Abordado el asunto de los mayores, Feijóo argumentó que “el reto demográfico” es el mayor de los desafíos que afronta Europa, incluso por delante de la invasión rusa de Ucrania, y reconoció que “es evidente que los jóvenes hoy necesitan más ayuda que nunca” frente a un Gobierno que “ha conseguido frustrar la prosperidad y la esperanza de las próximas generaciones”.

Feijóo puso distancia con el “conflicto generacional” porque “los mayores no ganan si los jóvenes pierden y los jóvenes tampoco ganan si los mayores pierden”. “Una sociedad en la que los jóvenes no pueden acceder a una vivienda, no pueden tener hijos y no pueden sostener los servicios públicos termina por empobrecernos a todos. Es, por tanto, una causa común y quizás la más importante de todas las que tenemos entre manos”, argumentó.

Feijóo pidió a los mayores que intenten “comprender las enormes dificultades de los jóvenes” porque “son la generación más digital, más formada y con mayor acceso al conocimiento, pero también la más precaria, más desmotivada y desesperanzada”.

“Viven al día; viven en habitaciones, que no en casas; y aplazan sus aspiraciones vitales, como tener hijos porque no tienen capacidad económica para mantenerlos. No creo en muros entre españoles ni tampoco en muros entre generaciones. No se puede construir nada desde la desconfianza entre los españoles y no se puede convertir el malestar de los jóvenes en resentimiento de éstos hacia los mayores. Porque el verdadero reto es unir”, se explayó.

Feijóo concluyó así que “el contrato generacional” es el que “más necesita en este momento Europa para volver a ilusionarse del mejor proyecto de arquitectura política institucional del mundo”, y volvió a censurar que estos debates no sean “el eco” de la conversación pública en España por culpa de los “sumarios judiciales”.