Congreso PP
Feijóo se lanza a por un Gobierno en solitario sin "cordones sanitarios" a Vox: "O Sánchez, o yo"
- Arranca su nueva carrera a la Moncloa desde "la centralidad" y sitúa el Congreso Nacional del PP como "el acto fundacional de un nuevo tiempo"

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El presidente del PP y líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, expresó este domingo su intención de gobernar en solitario y, en caso de no obtener una mayoría absoluta, apoyarse en alianzas con todos los grupos parlamentarios menos Bildu, sin vetos a Vox, “como pide la izquierda”, y sin vetos al PSOE –que no al ‘sanchismo’–, “como pide Vox”. El gallego aprovechó la clausura del 21 Congreso Nacional del PP, que fue una exhibición de unidad y euforia en torno a Feijóo, para cerrar por primera vez la puerta a una coalición con el partido dirigido por Santiago Abascal, aunque tampoco dejó un compromiso explícito como sí hizo con otras materias.
“Solo hay dos opciones: o Sánchez, o yo. No hay más. Y yo quiero un Gobierno en solitario porque el único en coalición que ha habido hasta la fecha no ha funcionado, no quiero darle a mi país los mismos espectáculos que vemos cada martes en el Consejo de Ministros”, aseveró en una intervención de 47 minutos que, tras hacer un repaso de la renovación ideológica del partido –ocho años después–, finalizó con seis auto preguntas para clarificar cuál será su política de pactos si tiene la oportunidad de llegar a La Moncloa.
Feijóo apostó por “trabajar en conseguir las alianzas en el Congreso” necesarias para legislar y se abrió a mirar a derecha e izquierda, en aras de reeditar el denominado “viaje al centro” con el que José María Aznar se impuso a Felipe González en las elecciones de 1996. Si son necesarios los votos de los independentistas para ser investido, garantizó que no les va a dar “nada” prohibido por la nueva ponencia política del PP, como la amnistía a Carles Puigdemont, expresidente de la Generalitat de Cataluña fugado de la Justicia.
El discurso de Feijóo, el primero desde su proclamación como candidato a las elecciones generales, fue un esbozo de las líneas de actuación de su futuro Gobierno si llega a La Moncloa. Y la última que destacó, ante la expectación máxima de los más de 3.000 compromisarios e invitados, es que quiere gobernar en solitario, es decir, sin ministros de Abascal, al que negó la posibilidad de tener poder ejecutivo en un futuro Gobierno que alcance.
Hasta la fecha, Feijóo nunca se había expresado con tanta contundencia sobre su relación con Vox. Por ejemplo, la nueva ponencia política del PP no hace alusión a Vox ni a fuerzas políticas de la derecha. Solo se limita a señalar que “la defensa del Estado, la nación y el orden constitucional serán objetivo irrenunciable de cualquier pacto de Gobierno”, en un ideario que ha sido criticado en algunos foros mediáticos por no entrar en debates ideológicos sensibles. Feijóo recogió el guante y respondió a los críticos que le afean su indefinición.
SIN CORDONES SANITARIOS
“¿Vamos a establecer un cordón sanitario a Vox, como nos pide la izquierda? No, es la tercera fuerza política de este país, sus votantes merecen un respeto y yo no estoy dispuesto a arrinconarles”, dijo antes de plantear el mismo ejercicio con el PSOE, con el que se abrió a pactar cuando se marche el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. “Con este PSOE es imposible pactar, lo sé por experiencia, pero eso no significa renunciar para siempre a que este país recupere los consensos en los asuntos que lo requieren”, dijo.
Todas las encuestas auguran hoy que Feijóo necesitaría a Vox para llegar a La Moncloa. El objetivo del gallego, según fuentes ‘populares’, es “obtener una mayoría suficiente” para poder gobernar en solitario sin el apoyo de Vox. Es decir, sumar más escaños que todo el bloque de investidura, lo que le permitiría llegar a La Moncloa con una abstención del partido de Abascal en una hipotética sesión de investidura. La incógnita se despejará en 2027 si Sánchez no adelanta elecciones.
El presidente del Gobierno no parece por la labor de convocar las urnas, por lo que sobrevolará durante los meses la posibilidad de presentar una moción de censura a Sánchez con el apoyo de Junts. “¿Y qué pasará? Lo que ya ha pasado hace unos años”, dijo. “Es mejor ser claros: fuera de la ley y de la Constitución, nada de nada”, aclaró. Su relación con el nacionalismo, según prometió, será de “claridad y vigilancia”, y no les “engañará”.
En esa ecuación no está Bildu. A los ‘abertzales’ sí les levantará un cordón sanitario. Y, si es presidente del Gobierno, les interpelará en su primera intervención en el Congreso para advertirles de que “nada” hablará con ellos “mientras no pidan perdón a todas las víctimas de ETA y no ayuden a esclarecer todos los crímenes que costaron la vida” a más de 800 de españoles. Estas palabras arrancaron la mayor ovación de la jornada, solo comparable con su compromiso de “reducir la inmigración ilegal” en sus primeros 100 días de Gobierno. “¿Cómo no vamos a reducir lo ilegal?", planteó en un discurso muy ideológico.
DIEZ MEDIDAS EN 100 DÍAS
Más allá de la política de pactos, Feijóo se comprometió a “llevar debajo del brazo propuestas normativas” que aprobará en sus primeros 100 días como presidente que comenzarán por un plan de “regeneración democrática” para garantizar los “contrapesos al poder”, especialmente en el ámbito judicial. Entre otros compromisos, dijo que reformará la ley del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el Tribunal Constitucional y Fiscalía General del Estado para acabar con “los comisarios políticos”.
También anunció que en su primer Consejo de Ministros aprobará un plan de vivienda de aplicación inmediata y avanzó que aprobará una nueva ley de lenguas que permitirá “la enseñanza en el idioma común en toda España” desde el respeto en las lenguas cooficiales.
En el ámbito económico, Feijóo revisará las 97 subidas de impuestos del Gobierno y aspirará a incrementar el salario mínimo de acuerdo con empresas y trabajadores a la par que se mejora el salario medio. Y, según dijo, dotará de recursos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, basará su política de defensa en un “compromiso inequívoco con la paz”, incrementará el número de médicos y aprobará un plan nacional del agua.
CENSURA A SÁNCHEZ
Con la euforia por las nubes, Feijóo avisó a sus compañeros de que “hoy no acaba nada”, sino que “empieza todo”. Y situó el cónclave como “el acto fundacional de un nuevo tiempo”. “¡Vamos a demostrar que España tiene solución! El cambio no llegará solo por mero desgaste, aunque hay que decir que se empeñan bastante en ello. Llegará, sobre todo, por nuestra capacidad para dar esperanza”, dijo.
En este punto, Feijóo censuró el mandato de Sánchez, al que acusó de convertir “lo irregular en norma” y “la contratación pública” en “un botín para saquear por los corruptos sin escrúpulos”. El líder del PP no hizo apenas alusión a la delicada situación que atraviesa el PSOE tras la encarcelación de Santos Cerdán, su exsecretario de Organización, pero sí dejó un par de píldoras en un discurso centrado en ilusionar.
El líder del PP prometió “normalidad”. Es decir, que se cumpla la Constitución o que se aprueben Presupuestos Generales del Estado (PGE). “Y normalidad es también que en un país moderno los trenes circulen, la electricidad funcione, los aeropuertos no se colapsen, el agua salga de los grifos y las leyes aprobadas, como la ley del ELA, se cumplan y se paguen, que para eso la hemos aprobado y hay 4.000 pacientes esperando. Esto ha de ser lo normal, no las prácticas de Gobierno insalubres de los últimos años”, apuntaló.
Feijóo subrayó que “la nación española” no está “enferma”, sino que lo está “la esfera política”, y se fijó como objetivo “contribuir a sanarla” enmendando a un presidente del Gobierno que, a su juicio, miente constantemente. “Para mí, la política ha sido una vocación, no una ambición. Hago mías estas palabras del primer presidente de la democracia, Adolfo Suárez”, señaló. Los 'populares' han planteado en numerosas ocasiones el cambio de Gobierno como una especie de “transición” que revierta “los desmanes” del 'sanchismo', en línea con el discurso del gallego de hoy. No obstante, fuentes de su equipo negaron que intentara imitar al expresidente del Gobierno.
(SERVIMEDIA)
06 Jul 2025
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