En un comunicado, Fenadismer señaló que “comparte y apoya” las reivindicaciones de sus organizaciones agrarias, ya que “en buena parte coinciden con las que históricamente vienen planteando” el sector del transporte español.

Ambos colectivos se enfrentan a “problemáticas muy similares” en las relaciones comerciales con sus clientes, en la mayoría grandes empresas que “imponen” sus condiciones tanto a transportistas como agricultores, resaltó la federación de asociaciones.

Fenadismer hizo “un llamamiento a la responsabilidad” de las organizaciones agrarias y les demandó evitar los episodios vividos en las protestas galas que ocasionaron “importantes trastornos y perjuicios” a los transportistas españoles, que se cifran en torno a los 120 millones de euros.

Es por ello por lo que confió en que, de producirse algún acto violento o de coacción aislado en las manifestaciones, tanto el Ministerio del Interior como los Gobiernos de Cataluña y País Vasco “garanticen el derecho fundamental a la libre circulación” en la red viaria española “a fin de no perjudicar al resto de actividades económicas”.