Para la CEIM, las declaraciones del secretario general de UGT-Madrid, José Luis Daza, en las que afirma que la huelga general será muy dura y como no se ha conocido en Madrid, "descalifcan definitivamente por su carácter de grave irresponsabilidad a este representante sindical".

En opinión de los empresarios madrileños, "manifestaciones como éstas, que obedecen a una estrategia ya utilizada antes por las centrales sindicales para sembrar el miedo ante la opinión pública, sólo contribuyen a impedir que la mayoría de los ciudadanos puedan ejercer libremente un derecho constitucional reconocido como es el derecho al trabajo".

A su vez, la directiva de la CEIM asegura que dedicará odos sus esfuerzos hasta el día de la huelga, "para concienciar a los empresarios, trabajadores y sociedad en general, de los efectos tremendamente negativos de una huelga en estos momentos, en los que la demanda social pide medidas reactivadoras de la economía, que favorezcan la creación de empleo y no su destrucción".