Según informó la entidad con motivo del Día de los Derechos Humanos, estos créditos produjeron un impacto directo por valor de 25,5 millones de euros y hasta 5,5 millones de forma indirecta, según datos de la propia organización.

La integración social fue la partida a la que más crédito se destinó, con un 45,7% del total, seguida de la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social (36,7%), el derecho a la vivienda (9%) y la salud (7,1%).

El pasado año las inversiones de Banca Etica alcanzaron los 327,7 millones de euros, de los que 166,2 se destinaron al plano social. Estas cifras permitieron financiar 467 proyectos educativos, proporcionar alojamiento a 337 núcleos familiares y asistir a cerca de 66000 personas.