En el decreto del fiscal se apela a la “especial trascendencia” del suceso y se acuerda la práctica de varias diligencias. La primera de ellas tiene que ver con el oficio a la unidad del Seprona adscrita a la Fiscalía de Sala de Medio Ambiente y a las Comandancias de la Guardia Civil de las zonas implicadas de estos hechos con el fin de recabar su “colaboración” en la ejecución de las correspondientes diligencias.

Vercher quiere conocer el resultado de los análisis que se practiquen por el personal especializado del Seprona de estos microplásticos. Además, ordena que se oficie a la Consejería de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda de la Xunta de Galicia para que “informe sobre la llegada y detección del material potencialmente contaminante”.

En concreto, la Fiscalía pide que esos informes hagan especial referencia a la “incidencia y evaluación” de los efectos del vertido en relación al Parque Nacional das Illas Atlánticas, Parque Natural das Dunas de Corrubedo e as Lagoas de Carregal e Vixán, “por ser espacios de especial protección y consideración medioambiental”.

El decreto también establece que se comunique las fiscalías gallega, asturiana, cántabra y vasca la incoación de las presentes diligencias, recabando su colaboración para que “remitan cuantas actuaciones se hayan practicado” en su ámbito y a partir de ahora se abstengan de continuar con la investigación.