Para los expertos del Fondo, la Unión Europea sigue retrasada en la reactivación de la economía y el empleo respecto al conjunto de los países industrializados, en los que la previsión del FMI es que el empleo haya crecido a finales de año un 0,6 por cien.

Estas previsiones muestran que el mayor crecimiento de empleo se producirá este año en Canadá, en torno al 1,9 por cien, seguido de Estados Unidos, con un 1,7, mientras que otras naciones, como el Reino Unido y Japón, reistrarán cifras levemente positivas, un 0,2 y 0,3 por cien, respectivamente.

El resto de países que forman el grupo de las siete naciones más industrializadas del mundo, todos ellos europeos, no llegarán a tener tasas de crecimiento. Así, la previsión del FMI para Italia es del -1,3 por cien; para la antigua Alemania Occidental, del -1,2, y para Francia, del -0,2 por cien.

Sin embargo, las expectativas del FMI para el consumo muestran unas perspectivas de recuperación más rápidas que en el empleo ya que la previsión de crecimiento en la Unión Europea para el año que acaba es del 1,2 por cien.

En este punto, el comportamiento de la economía europea está en línea con el conjunto de países industrializados, aunque sigue por detrás de su media, situada en torno al 2,5 por cien, según el Fondo.

Estados Unidos y Canadá vuelven a encabezar la lista y a erigirse en motores de la economía mundial en la fase de reactivación que se avecina, con aumentos del consumo privado para1994 del 3,5 y el 31 por cien, respectivamente.

Les siguen Japón, con el 2,5, y Reino Unido, con el 2,6, mientras que el resto de países europeos miembros del G-7 vuelven a hacer gala de la moderación de sus economías con estimaciones del 1,3 por cien en Francia, 0,7 en Italia y 0,4 en la antigua Alemania occidental.