En la jornada del martes se vendieron más de 20.000 entradas en 12 horas. Los precios partieron de 195 euros para los tickets de la zona 'pelouse' y de 324 para la zona de grada, aunque estas categorías se agotaron en unos minutos. La venta ahora continúa en paralelo a la construcción del circuito con precios que oscilan entre los 545 y los 1.340 euros dependiendo del tipo de pase y del lugar de los asientos.

De todas las entradas vendidas, un 25% se comercializaron fuera de España según la organización. La campaña de lanzamiento de entradas está activa en distintas partes del mundo. Coincidiendo con la salida a la venta al público general, se proyectó en las pantallas de Times Square (Nueva York), Burj Khalifa (Dubái), Shinjuku (Japón) y hasta 8 repartidas por Ciudad de México.

De las entradas vendidas fuera de España, Reino Unido se posiciona como el primer país con un 4% de las ventas, lo que para los promotores del evento es síntoma de que "la población más experta y con más arraigo de Fórmula 1 considera atractivo el Gran Premio de España". Le sigue México con un 3% y en tercera posición se sitúa Estados Unidos con un 2,5% de las ventas, un país donde la F1 cuenta con 3 citas.

Las obras para el circuito en Ifema van "con adelanto", según relató el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, hace dos semanas coincidiendo con el inicio de la cuenta atrás para el evento a falta de un año. En la estación de Metro de la Puerta del Sol, un cronómetro de la relojera suiza Tag Heuer cuenta las horas minutos y segundos restantes para que se apaguen los semáforos en el Madring.

El trazado tiene una longitud de 5,4 kilómetros y 22 curvas por las que lo monoplazas darán 57 vueltas. Como peculiaridad contará con la 'Monumental' una curva con un peralte del 24% y seis segundos de giro ante 45.000 espectadores, bautizada así en por su complejidad y por su forma similar a la de una plaza de toros como la de Las Ventas.