No obstante, el Foro Ermua apela en un comunicado a la reflexión al Gobierno vasco y al Gobierno español, a las universidades, centros educativos y a toda la sociedad en general acerca de "la juventud de los componentes detenidos".

"¿Quién educa a estos jóvenes en el fanatismo? ¿Qué responsabilidades deben asumir los gobiernos competentes? ¿Qué medidas habría que arbitrar para frenar la deriva radical de parte de la juventud vasca?", se pregunta esta organización.