Reiterando sus críticas a las negociaciones del Gobierno con CiU, el presidente de la Xunta señaló que la política, además de ser el arte de lo posible, debe también "hacer posible lo necesario", y añadió: "Lo que es necesario en España en estos momentos es un cambio de Gobierno, porque hoy no da la impresión de que exista algo parecido a un Gobierno y una Administración con propuestas y objetivo en España".

Sin embargo, Fraga mostró su aprobación por la renuncia de Felipe González a ser futuro presidente de la Comisión Europea. "Una vez que esa candidatura no existe, esperamos que se acierte a elegir un buen candidato para esta nueva e importante etapa", declaró en la rueda de prensa que siguió a la reunión semanal de su Ejecutivo.

El presidente de la Xunta dijo esperar que cada país, y España en particular, den prioridad a sus problemas, y se refirió a cuestiones como el incremento draático de los incendios en casi toda España, la situación de desempleo y el desánimo de la Bolsa. A su juicio, es "evidente que no es el momento de dejar las responsabilidades que cada uno pueda tener en este momento".

En relación con las críticas realizadas por el presidente del Grupo Socialista en el Congreso, Joaquín Almunia, sobre declaraciones suyas en torno al enfrentamiento dialéctico con Pujol, Manuel Fraga reiteró su rechazó al secretismo y el carácter unilateral de las negociaciones del Gobieno con CiU.

En su opinión, estas negociaciones deberían llevarse al Parlamento, o presentar una moción de confianza o formalizar un pacto de legislatura o un Gobierno de coalición.

Fraga recordó que si entró en polémica fue por las declaraciones de Pujol, con las que, a su juicio, "se pretendió imponer a Galicia otro pacto para que retirase su recurso justificadísimo a la cesión del 15% del IRPF por una ley de presupuestos y sin revisión previa de la LOFCA". También recordó que las declaraciones o fueron reiteradas ni defendidas por nadie, y las achacó a un momento de "posible excitación" del presidente de la Generalitat, que reclamó la retirada del recurso de inconstitucionalidad como paso previo a la posible suscripción de algún acuerdo con el PP.

Manuel Fraga insistió en que "Galicia tiene todo el derecho a decir lo que pasa, qué clase de pactos se hacen y sobre todo procurar, si es posible, que no se hagan a nuestras espaldas ni a nuestra costa".