En declaraciones a Radio Nacional, Fraga matizó que no habla en general de todos los nacionalistas, pero insistió en que, "en conjunto, no dan las medidas serias de lo que en este momento pide spaña" y "el mundo, que es sumar y no restar".

Tras afirmar que siente un gran respeto por el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, indicó que en estos últimos días éste ha pecado de una "falta de medida" en sus palabras. "Yo no dudo de su profundo sentido del Estado, no dudo de que él, al final, da interpretaciones más exactas, pero afirmar de ese modo tajante: 'Cataluña es una nación y España no', eso no es hablar en serio de política", dijo.

Fraga consideró positivo que entre P y PSOE, aun manteniendo las "distancias" y las "diferencias", exista un diálogo "más claro" y "más franco", como ha ocurrido en los últimos días, para que se produzcan buenos resultados.

A pesar de señalar que la Declaración de Mérida contiene puntos con un "matiz partidista", aseguró estar más cerca de este documento que del que suscribieron en Barcelona los nacionalistas catalanes, vascos y gallegos.

Por otro lado, el presidente de la Xunta discrepó con Miguel Herrero de Miñón, uno de los "pares" de la Constitución, quien afirmó que de la lectura de la Carta Magna cabe asumir el derecho de autodeterminación.

Fraga admitió que la Constitución incluye una referencia general a todas las declaraciones de derechos válidas a nivel mundial y europeo, entre ellos la autodeterminación. "No es lo mismo el derecho de autodeterminación para algo que era una antigua colonia en Africa que para países que llevan organizados mucho tiempo, donde no ha habido conquista", explicó.