LA FRAVM CREE QUE LAS CONSULTAS POPULARES CON PARA ASUNTOS MAS IMPORTANTES QUE LA UBICACION DE UNA ESTATUA

MADRID
SERVIMEDIA

La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) criticó hoy al Ayuntamiento por someter a consulta popular l ubicación de una escultura de Carlos III, al entender que los referéndums deben ser utilizados para decidir otras cuestiones de mayor trascendencia para los ciudadanos.

No obstante, la FRAVM ha abierto con 100.000 pesetas una suscripción popular para costear la estátua, "como la mejor demostración del reconocimiento histórico y cultural de dicho personaje para la historia de nuestra ciudad", según un comunicado hecho público hoy.

Tras expresar su sorpresa por la iniciativa del equipo de gobiernomunicipal, la FRAVM subrayó que dedicar 22 millones a la realización de la obra contrasta con la política de "ahorro drástico" en la que está embarcada la Casa de la Villa.

"Si a esto añadimos el coste de un referéndum municipal, que ascendería a varios millones de pesetas más, sería como matar moscas a cañonazos", asegura la nota.

La peatonalización del centro de Madrid, las normas de participación ciudadana, la reforma de la Casa de Campo, la instalación de CAD en los barrios y la ampliación de aeropuerto de Barajas son otros proyectos que, en opinión de la FRAVM, sí requieren de una consulta popular antes de llevarlos a la práctica.

"Es muy importante", agrega el comunicado, "que las consultas populares de los ayuntamientos se centren en temas de máxima relevancia para el bienestar ciudadano". La FRAVM anunció que solicitará al presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, que regule próximamente esta posibilidad.

El equipo de gobierno municipal y la FRAVM han mantenido recietemente un duro enfrentamiento con ocasión de la aprobación de las nuevas normas de participación ciudadana.

El Ayuntamiento ha rebajado este año a 50 millones la partida destinada a subvencionar a las asociaciones, mientras que en el ejercicio anterior la cifra ascendió a 100 millones.

Los vecinos entienden también que las nuevas normas de participación recortan sus derechos y suponen un ataque a las conquistas de los movimientos sociales y vecinales.

(SERVIMEDIA)
04 Jun 1992
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