Aunque el objetivo era alcanzar una cobertura del 50% entre la población de más de 65 años, el colectivo de mayor riesgo, la vacunación llegó hasta el 52,1 por ciento en esta franja de edad.

En comparación con la campaña de 1992, el porcentaje de vacunados de más de 65 años subió casi en dos puntos,desde un 49,24 al 52,1 por ciento. En la última campaña, el 61 por ciento de las vacunas antigripales suministradas fueron para personas de más de 65 años.

Un 11,7 por ciento de las vacunas fueron para inmunizar a personas que padecen enfermedades crónicas del aparato cardiopulmonar, y un 2,7% para personas con enfermedades metabólicas (diabetes, etc.).

En total, los servicios sanitarios gallegos distribuyeron durante el año pasado 430.154 dosis, de las que fueron aplicadas 373.836 (un 87 por cieto).

Según el mencionado informe de la Xunta de Galicia, el incremento progresivo de las vacunaciones antigripales ha logrado la disminución de esta enfermedad, al pasar de 175.401 casos registrados en 1990 a 132.555 en 1993.