Según estas fuentes, "es falso que exista una 'cartelización' -acuerdos ilegales- del sector para subir y bajar los precios, y afirman que el encarecimiento de los carburantes de los últimos días se debe en exclusiva a la depreciación del euro frente al dólar, moneda en la que se negocian los contratos de petróleo, y a la subida del preci del crudo".

Ademas, las fuentes consultadas por esta agencia aseguran que las subidas de los últimas días "no han compensado ni mucho menos el perjuicio que ha supuesto en los últimos meses mantener precios que no estaban reflejando el precio del crudo y los tipos de cambio", y cifran dicho perjuicio económico en unos 12.000 millones de pesetas para el conjunto del sector sólo en noviembre y diciembre".

A pesar de las subidas practicadas en diciembre y las llevadas a cabo en los últimos días, la petroleras señalan que no se ha recuperado la totalidad del desfase entre precios de venta al público de los carburantes y costes soportados por las subidas del crudo, y coinciden en que "para equilibrar precios y costes las gasolinas deberían subir en España al menos otras cinco pesetas más".

El secretario general de la patronal petrolera, AOP, Aurelio Ayala, abundó en este planteamiento al declarar en los medios de comunicación que "estamos ante una situación de peligrosa indefinición", ya que "en stos momentos faltan 3 millones de barriles diarios en el mercado mundial".

Por este motivo, añadió, "si prosigue el incremento del precio del barril, también aumentará el precio del carburante", aunque advirtió que la situación no es exclusiva de España y "afecta a todos los mercados"