Pese a la falta de pruebas, Blázquez, que entregó a la prensa dicho informe y el del Instituto Oficial de Metrología, afirmó que ambos estudios admiten la posibilidad de que exista fraude, y apuntó que, a su juicio, el problema podría extenderse a otros puntos de España.

El consejero señaló también que os indicios encontrados (como precintos saltados) son suficientes para entrar en la vía sancionadora, y agregó que, si no se hace, es porque el caso ya está en vía judicial.

Blázquez dijo que pedirá al fiscal del caso permiso para atender la demanda del técnico alemán de llevarse las pruebas extraídas a su país, y proseguir allí con su investigación. Si la respuesta judicial es positiva, añadió, se enviarán las pruebas en 24 horas.

También señaló que la Dirección General de Industria en la Comuniad trabaja al cien por cien en el caso, y que dispondrá de unas 40 personas en las próximas semanas para inspeccionar cada uno de los surtidores de la región.

El consejero de Economía de Madrid advirtió también al resto de comunidades autónomas sobre el alcance del fraude detectado, y puso en duda que se limite sólo a la comunidad madrileña. "Estamos", dijo Blázquez "ante un problema que puede ser o que debe ser de alcance nacional".