El fabricante de componentes de automoción elevó sus ingresos un 7%, hasta los 1.256 millones, mientras que su Ebitda se redujo en 4 millones y se situó en 254 millones.

“Los resultados del primer trimestre vuelven a confirmar la tendencia que ya registró Gestamp a cierre de 2021, cuando consolidó unos niveles de rentabilidad superiores a los anteriores a la pandemia (2019), a pesar de la inestabilidad en la producción y el menor volumen del mercado, gracias a la estrategia implementada desde 2020 para mejorar la flexibilidad y la excelencia operativa”, señala la multinacional en un comunicado.

Gestamp pone en valor estos resultados en un contexto de una caída de volúmenes de producción de 4,5% como consecuencia de la falta de suministros de semiconductores, así como por la situación en Ucrania que ha impactado al suministro de otros componentes efectos relacionados con las restricciones de la covid en China.

Gestamp cerró marzo con una deuda neta de 2.382 millones de euros (100 millones menos que en marzo de 2021), y una liquidez de 1.400 millones de euros.