Santiago expuso este dato durante el diálogo ‘Los retos del trabajo autónomo’, organizado por el Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos de España en la agencia de noticias Servimedia.

“El autónomo bastante tiene que se levanta a las cinco de la mañana para sacar su negocio adelante y a su familia, pagar deudas, pagar facturas y recibir problemas y acostarse a las tantas pensando en lo que tiene que pagar al día siguiente”, advirtió Santiago, quien criticó que solo se hable desde las administraciones de conciliación para los asalariados y no para los trabajadores por cuenta propia.

Además, se refirió a la polémica sobre los abogados y procuradores mutualistas, que vienen denunciando desde hace meses que sus pensiones son muy precarias, un problema que Santiago dijo que también sufren los mutualistas gestores administrativos. A ellos, Seguridad Social ya les ha ofrecido una solución para que puedan acogerse al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).

Santiago recordó que hasta 1995 no podían elegir, lo que sí pudieron hacer desde esa fecha. “Lo que no se puede continuamente es cambiar las reglas de juego y, sobre todo, el que tiene el juego”, aseveró el presidente de esta institución colegial, quien ironizó con que en su “época” cuando eso pasaba se podían dar “dos bofetadas” dialécticamente hablando y, en cambio, ahora hay que seguir sentados en la mesa de diálogo aunque se salten los acuerdos.

COLECTIVO MÁS VULNERABLE

Por su parte, el economista de Willis Tower Watson (WTW) Rafael Villanueva aseguró que el colectivo de autónomos es "más vulnerable" en lo que se refiere a la jubilación, dado que si un trabajador comienza percibiendo una pensión que supone el 75% de los ingresos del último salario, un autónomo se queda en solo el 40%, aproximadamente.

A su juicio, es una “buena noticia” que aumente la esperanza de vida, aunque la natalidad no para de caer y, en consecuencia, el sistema de pensiones se encuentra en “una situación apretada”. Para Villanueva, “siempre vamos a tener pensión pública, eso es evidente”, pero hay organismos que ya advierten de que “las pensiones del futuro, con total seguridad, van a ser probablemente menos generosas”.

Por ello, animó a “crear ahorro complementario para tener jubilaciones tranquilas”, ya que “antes la gente se jubilaba a los 65 años y por esperanza de vida fallecía a los setenta y pocos”, por lo que no había “mucho donde preocuparse en el tema financiero”. Dentro de esta situación compleja, a su juicio, los autónomos presentan “una foto más difícil” y encaran con la jubilación “un reto mayor”.

Como aspecto positivo, este experto resaltó que “ahora se le abre afortunadamente” al colectivo “una ventana de oportunidad” con los planes de empleo, ya que hasta la normativa aprobada en 2022 los autónomos estaban “ausentes del segundo pilar de la previsión”, que sí se daba como posibilidad en las empresas para los asalariados.

“Es importante que todo este sistema se engrase y se desarrolle, que fructifiquen los planes sectoriales, los planes para autónomos, pero sin duda es un escenario nuevo para ellos”, añadió Villanueva.

Al respecto, concluyó que este cambio legal debe venir acompañado, no sólo para autónomos, sino para las sociedades en general, de “cierta promoción de la cultura del ahorro, que es un poco la otra cara de esta moneda, que también es lo que nos falta”.

RECORTE

Finalmente, el presidente de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, puso el foco en la falta de diálogo de la ministra de Inclusión, Seguridad social y Migraciones, Elma Saiz, por no haber recibido todavía a las asociaciones de autónomos. Al respecto, censuró que lo “último” que ha promovido el Ministerio ha sido una propuesta que “pretende recortar” la pensión de los autónomos que compatibilizan la pensión con el ejercicio de su actividad pese a haber llegado a la edad legal de jubilación.

Fuentes del diálogo social explicaron que la iniciativa supondría que para percibir la pensión íntegra, habría que pasar de esperar un año a cinco. Ello significa que no la cobrarían completa hasta los 71 o los 72 años, en líneas generales. “Nos sorprende que un gobierno progresista quiera recortar esa pensión”, afeó Amor, quien denuncio que es “lo último” que han sabido de la ministra.