Así lo indicó en el turno de réplica al diputado de ERC Joan Margall en el segundo día del Pleno del Congreso sobre las enmiendas a la totalidad a los presupuestos.

Montero reconoció que comparte con ERC la política fiscal “de manera global” y subrayó la posición del partido independentista sobre que los nuevos tributos a las empresas energéticas, banca y solidaridad.

La ministra apuntó que piden a familias y empresas “un mayor esfuerzo a los que tienen mayor capacidad” y mientras “rebajan” la carga fiscal de manera que “el saldo neto sigue siendo una aportación que nos permita financiera de manera más efectiva los servicios públicos”.

Asimismo, subrayó la importancia de la “imposibilidad de aplicar créditos fiscales” a los grandes grupos consolidados que facturan 200 millones de euros, lo que “tiene un efecto muy importante en las cuentas de resultados de los grupos”.