EL GOBIERNO APRUEBA EL PROYECTO DE LEY QUE RECONOCE LA LENGUA DE SIGNOS Y LOS SISTEMAS DE APOYO A LA COMUNICACIÓN ORAL
- Un millón de personas sordas podrán solicitar intérpretes y sistemas de apoyo a la comunicación en diferenes ámbitos públicos y privados
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El Gobierno aprobó hoy el proyecto de ley que reconoce la lengua de signos y los sistemas de apoyo a la comunicación oral, que, según la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, beneficiará a un millón de personas.
La norma facilitará a las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas la utilización de intérpretes de lengua de signos y el establecimiento de medios de apoyo a la comunicación, cuando lo precisen, en diferentes ámbitos públicos y privados: educación, empleo, salud,cultura, deporte y ocio (cuando se solicite previamente), transportes, relaciones con las administracionespúblicas, participación política, medios de comunicación social, telecomunicaciones y Sociedad de la Información.
"Ha habido un amplísimo consenso para una norma que no sólo mejorará la vida de un millón de personas con problemas de sordera o con dificultades para oír, sino de todos los conciudadanos que convivamos con ellos", aseguró la vicepresidenta del Gobierno al presentar el proyecto de ley.
Asimismo, explicó Fernández de la Vega, "con este proyecto de ley ponemos a España a la vanguardia de la protección de los derechos de las personas con discapacidad auditiva, junto a países pioneros como son Francia y Finlandia".
En este texto rige el principio de libertad de elección por parte de las personas sordas, con discapacidad auditiva o sordociegas, por lo que se reconoce y regula de forma diferenciada el conocimiento, aprendizaje y uso de la lengua de signos española, así como de los medios de apoyo a la comunicación.
Por lo que se refiere al aprendizaje, el proyecto de ley establece que las administraciones educativas dispondrán lo necesario para promover el aprendizaje de la lengua de signos española al alumnado sordo, con discapacidad auditiva o sordociego que libremente haya optado por esta lengua.
En caso de que esta persona sea menor de edad o esté incapacitada, la elección corresponderá a los padres o representantes legales. Además, se garantizará el aprendizaje de la lengua oral y de los medios de apoyo a la comunicación a las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas usuarias de estos sistemas.
PROFESIONALES CUALIFICADOS
Con el fin de disponer de profesionales debidamente cualificados para la enseñanza de la lengua de signos española y de los medios de apoyo a la comunicación, la administración educativa competente determinará las titulaciones que considere oportunas.
El proyecto de ley establece también la creación, en el Real Patronato sobre Discapacidad, del Centro de Normalización Lingüística de la Lengua de Signos Española. La finalidad de este organismo será la de investigar, fomentar, difundir y velarpor el buen uso de esta lengua.
El citado organismo estará compuesto por profesionales expertos en lengua de signos española y en sociolingüística, y desarrollará sus acciones manteniendo consultas y estableciendo convenios con las entidades representativas de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas y de sus familias, usuarias de la lengua de signos española.
Además, el Gobierno creará, en el Real Patronato sobre Discapacidad, el Centro Español de Subtitulado y la Audiodescripción, con la finalidad de investigar, fomentar, promover iniciativas, coordinar actuaciones y extender la subtitulación y la audiodescripción como medios de apoyo a la comunicación de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.
Este proyecto de ley, pionero en Europa, es una reivindicación histórica del movimiento asociativo representativo de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.
Estas personas, para su integración, deben superar barreras de comunicación que son en apariencia invisibles a los ojos de las personas sin discapacidad auditiva. Con esta norma se intenta propiciar el acceso a la información y a la comunicación de las personas sordas, teniendo presente su heterogeneidad y las necesidades específicas de cada grupo.
La norma reconoce la lengua de signos española como lengua de las personas sordas en España que libremente decidan utilizarla, así como su aprendizaje, conocimiento y uso, aunque el texto también reconoce la existencia de la lengua de signos catalana en su ámbito de uso.
(SERVIMEDIA)
13 Ene 2006
M