El acuerdo supone la renuncia al cobro de los créditos concedidos a través del Fondo de Ayuda al Desarrollo, decisión justificada por el Gobierno español por las "especiales relaciones que unen a la República de Nicaragua y el Reino de España y con el fin de apoyar de forma significativa el desarrollo y estabilidad económica de Nicaragua".

La condonación afecta al principal y a los intereses de los créditos contemplados en los "Acuerdos Bilaterales de Refinanciación".