Así lo trasladaron a Servimedia fuentes de Seguridad Social tras el encuentro, que tuvo lugar después de que desde este lunes la delegación del Parlamento Europeo mantuviera diferentes reuniones con los Ministerios de Hacienda y el de Asuntos Económicos, así como con los agentes sociales.

Además, el encuentro con Escrivá llega tras el viaje a Bruselas de este lunes del ministro, donde defendió que la segunda fase de la reforma de pensiones estará lista antes de Semana Santa.

Dicha pata de la reforma aborda cuestiones como el destope de las bases máximas de cotización y un aumento en el período de cálculo de la pensión, aunque todos estos flecos siguen abiertos por el momento al estar abiertas las negociaciones.

Entre tanto, en la reunión de este martes con los eurodiputados, el foco se puso en explicar las claves de la primera fase de la reforma de pensiones que, según destacó el Ministerio, propicia alinear la edad efectiva de jubilación con la edad legal mediante incentivos y medidas voluntarias, ha permitido separar los gastos no contributivos de los que sí tienen esa naturaleza y se basa en medidas orientadas a aumentar los ingresos, “reforzando la sostenibilidad del sistema”.

En este sentido, se profundizó en las medidas de aumento de ingresos y de separación de gastos impropios en materia de pensiones, y en las interacciones entre la reforma laboral y la de pensiones, que refuerzan el aumento de la productividad y la mejora estructural de los ingresos fiscales.

REFORMA LABORAL

Precisamente, desde el departamento dirigido por José Luis Escrivá incidieron ante la delegación europea en que la reforma laboral es “muy ambiciosa” y está orientada a reducir los problemas estructurales del mercado laboral español, singularmente “desempleo y precariedad”.

“La nueva normativa ha buscado resolver las causas de estos problemas con un nuevo marco contractual frente al elevado porcentaje de trabajo temporal, creando mecanismos de flexibilidad interna y reforzando la formación dual. Los resultados muestran una notable creación de empleo, de mayor calidad y con una sustancial reducción de la temporalidad, especialmente en los jóvenes”, indicaron las fuentes del Ministerio.

Sobre la política de inclusión, el ministro señaló que se orienta a resolver el problema de la desigualdad de rentas y de la pobreza sobre los que la propia Comisión Europea había hecho múltiples recomendaciones. “Es una política moderna y focalizada, con umbrales no solo de renta sino de patrimonio, orientada a la integración socio-laboral y a reducir la economía sumergida, con un mecanismo de evaluación permanente”, defendieron desde el Ministerio.

También se puso en valor la apuesta por la formación dual, así como la adopción de medidas para reducir la brecha de género que sufren las mujeres en ámbitos como el mercado laboral o las pensiones.

Finalmente, el Ministerio subrayó el aumento registrado en la competitividad de la economía española en los últimos años, y la importancia del diálogo social y del consenso político, “claves para preservar las reformas en el largo plazo”.