Ribera hizo esa consideración en declaraciones a los periodistas en la sede de su departamento, en Madrid, tras reunirse con la presidenta de Navarra, María Chivite.

El Principado de Asturias fue el primero en activar el nivel 2 de emergencia ante la crisis ambiental desatada por el hecho de que el buque de bandera liberiana 'Toconao' perdiera el pasado 8 de diciembre un contenedor que transportaba 1.050 sacos de 25 kilos de pélets de plástico frente a la costa portuguesa de Viana do Castelo.

El Gobierno asturiano activó ese nivel de alerta por la presencia de microplásticos a “un número importante de playas”, según Ribera, que añadió que su departamento cuenta con una base logística en Pontevedra dotada con material de lucha contra la contaminación.

“Será el punto de partida más importante y con la dotación de equipos de personas que, en función de las necesidades y de los requerimientos que recibamos de cada una de las tres comunidades autónomas, podrá cambiar. Y a partir de mañana estarán operativos ya en Asturias, que es con quienes hemos podido empezar más rápido. Estamos pendientes de en qué se concreta la petición de ayuda de Galicia y, en su caso, de Cantabria", añadió.

MEMORIA “MUY DURA”

Por otro lado, Ribera comentó que la “memoria reciente de episodios de contaminación marina” en Galicia es “muy dura” y “muy complicada”, y allí “la sensación de abandono de la población local por parte de las autoridades todavía pervive”.

“Eso, en un momento en el que, además, hay elecciones en un plazo de tiempo relativamente corto, puede generar una preocupación que se concreta en los ayuntamientos, en los vecinos, en las distintas fuerzas políticas muy diferentes”, comentó, en alusión a los comicios gallegos del próximo 18 de febrero.

En este sentido, destacó que “los ciudadanos lo que quieren es la máxima colaboración entre administraciones desde el primer momento, con la máxima agilidad”. “Me sorprendió la reacción del lunes por la mañana del presidente de la Xunta y del presidente del Partido Popular diciendo que era desleal ofrecer ayuda”, indicó, antes de añadir que “una afirmación de esas características” tiene “más que ver con la preocupación por el impacto electoral que pueda tener un episodio como este”.

Por último, Ribera precisó que los niveles de toxicidad de los pélets deben ser evaluados por la Xunta de Galicia, que aún no ha comunicado al Gobierno ninguna información.

“Los plásticos en el mar son uno de los elementos de contaminación más importantes y que más ha llamado la atención desde hace mucho tiempo, y contra los que estamos luchando intensamente. Hasta el punto de ser el elemento que ha generado una reacción más amplia y más comprometida en el último año y medio en Naciones Unidas y en la propia Unión Europea”, concluyó.