La sequía está afectando a la mitad sur de la península, sobre todo a las explotaciones de regadío de arroz, algodón y maíz, aunque en menor proporción que el año pasado.

Entones, el Gobierno adoptó algunas medidas, como la condonación y prórroga del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y de las cuotas a la Seguridad Social, que han vuelto a ser reclamadas por Asaja este año.

Atienza, que asistió hoy a la clausura de la II Conferencia Agraria de Asaja, anunció que solicitará a la UE que financie la reestructuración que va a ocasionar en España la reforma de la OCM (Organización Común de Mercado) del vino, ya que supondrá la desaparición de entre 200.000 y 400.000 hectáreas deviñas, según han denunciado las organizaciones agrarias.

El ministro reconoció que la propuesta aprobada por la Comisión Europea incorpora algunas modificaciones "positivas" para España, pero matizó que "aún dista mucho de satisfacer nuestras exigencias".

Atienza señaló que "nos espera una larga y dura negociación para lograr que esta reforma no afecte al sector vitivinícola español", en referencia a la reunión que mantendrá en el próximo Consejo de Ministros de Agricultura 'informal', que se celbrará este fin de semana en Grecia.

España exigirá que se aplique el principio de solidaridad financiera, que el ajuste se financie con fondos comunitarios en su totalidad (la UE sólo está dispuesta a aportar entre el 50 y el 75 por ciento de las ayudas), que no sea obligatorio el arranque de viñedos y que se palie el efecto medioambiental de este arranque.

El recién estrenado ministro de Agricultura se encontró en las jornadas organizadas por Asaja con un auditorio hostil, que llegó incluso a abchearle cuando aseguró que las ayudas comunitarias al campo español han crecido en los últimos años un 50 por ciento, frente al 10 por ciento del resto de Europa.