El acuerdo, que se enmarca dentro de la Camaña de Comunicación Euro, reforzará las acciones informativas y formativas para que la pequeña y mediana empresa se adapte cuanto antes a la nueva moneda, ya que a partir del 1 de enero de 2002 será obligatorio operar en euros.

Para lograr los objetivos establecidos en el acuerdo, está previsto el desarrollo de diversas acciones informativas en las que se analizarán las repercusiones de la introducción del euro en las distintas áreas de actividad de las empresas.

Asimismo, se distribuirán cientosde miles de folletos dirigidos a las pymes para explicar la necesidad, entre otras cosas, del doble etiquetado de los precios y de evitar abusos en los precios con el cambio de moneda.