Fernández de la Vega se reunió con el presidente de México, Felipe Calderón, a las ocho y media de la mañana hora local, tres y media de la tarde hora española, y en la rueda de prensa posterior respondió a varias preguntas sobre la decisión de la Audiencia Nacional y sobre la petición del COE a los deportistas que integran la delegación española para que eviten hablar de política.

Expresó el respeto del Gobierno por la decisión de la Audiencia Nacional, basada en el principio de jurisdicción universal, y descartó que pueda generarse un conflicto diplomático entre España y China, en primer lugar porque hay respeto al principio de soberanía, y relaciones diplomáticas que permiten explicar el origen de este tipo de decisiones y el funcionamieto de las instituciones.

Las autoridades chinas conocen el funcionamiento institucional en España y saben que el poder judicial es independiente, dijo la vicepresidenta, que no obstante dejó ver la evidencia de que esta decisión del juez Pedraz deberá ser convenientemente explicada a las autoridades de Pekín.

La vicepresidenta expresó también con claridad el respaldo del Gobierno al Comité Olímpico Español al subrayar que la familia olímpica tiene unas normas establecidas que deben ser respetadas por todos sus integrantes y cuyo punto 50.3, precisó, prohibe manifestaciones de carácter político, religioso o racial en la villa olímpica.

El Gobierno juzga por tanto "lógica" la petición del COE a los deportistas para que esas reglas se respeten durante los Juegos de Pekín, "más allá de que cada deportista tenga su manera de pensar".