Así se pronunció desde el Congreso de los Diputados, donde quiso "poner en valor" cómo ha funcionado en este proceso "todo el sistema de supervisión y todo el acompañamiento de esa opa por los distintos organismos que tenían la obligación de hacerlo, tanto la Comisión Nacional del Mercado de Valores, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, el Banco de España o el propio Gobierno con las condiciones que establecimos en Consejo de Ministros".

En cuanto al resultado final, Bolaños únicamente quiso puntualizar que "la decisión última era de los accionistas del Sabadell y han hablado con claridad". "Por parte del Gobierno, máximo respeto a la decisión que han tomado tres cuartas partes de los accionistas del Sabadell", remarcó.

Al respecto, el ministro quiso destacar que "España es un país muy atractivo para inversiones y también para operaciones mercantiles", poniendo énfasis en que "tanto el BBVA como el Banco Sabadell son dos entidades financieras solventes, sólidas, bien gestionadas, con proyectos de futuro y que son representantes de un sistema financiero español que es modélico en Europa, que es solvente, que funciona y que es ejemplar".

Por ello, animó a ambas entidades a "trabajar con proyectos empresariales por separado para seguir reforzando ese nombre y esa reputación que tiene el sistema financiero español fuera de nuestras fronteras".