Así lo indicó en la inauguración del del 37º Congreso Aecoc de Gran Consumo, celebrado en Santiago de Compostela por la patronal que incluye a 31.000 empresas de distintos sectores.

González subrayó, además del “compromiso” de las empresas con la contención de precios, que la composición del sector en España “garantiza que exista una gran competencia entre operadores”. Así, la cuota de mercado de los cinco grandes distribuidores de alimentación nacionales es del 50%, mientras que en países del entorno la concentración de los cinco principales operadores está entre el 70% y el 80%.

“El modelo da una gran capacidad de elección al consumidor, que puede escoger entre muchos establecimientos y marcas, y esa es la mejor garantía contra la especulación con los precios”, apuntó.

Por ello, el presidente de Aecoc dijo al Gobierno que “debe ser solidario con los ciudadanos y no traspasar a las empresas la responsabilidad en la contención de precios”, porque es momento de que haga “un ejercicio de responsabilidad”.

El sector reclama en primer lugar la reducción temporal del IVA de los alimentos esenciales, especialmente de muchos frescos que podrían pasar de un tipo reducido a un superreducido. “Se trata de una medida de ahorro para todos los hogares, que incentivaría el consumo y que se aleja de las políticas que ahondan en una deuda que, finalmente, deberán pagar consumidores y empresas”, indicó González.

Otras de las medidas propuestas por el presidente de Aecoc es la deflactación del IRPF, el aplazamiento de impuestos que exijan grandes inversiones a las empresas y dar seguridad jurídica a las compañías. “Hay una proliferación normativa que genera inseguridad y frena la inversión. Necesitamos escenarios más largoplacistas y que eviten la duplicidad de normativas entre comunidades autónomas. No podemos seguir caminado sobre arenas movedizas”, explicó.

En contraposición a estas propuestas, González lamentó la aprobación de normativas que impactan en las empresas y “agravan el incremento de costes”. Entre estas medidas, citó las 30 regulaciones aprobadas este año en España que “exigen inversiones millonarias”, como el Real Decreto de Envases o el impuesto al plástico de un solo uso.

“No se está apoyando al sector; de hecho, se le criminaliza y se le presiona con la regulación. El gran consumo ya soporta una fiscalidad muy elevada y, si seguimos sumando costes, pondremos en riesgo la supervivencia de miles de pymes”, subrayó.

SUBIDAS DE PRECIOS

En su intervención, el presidente de Aecoc recordó que el IPC de los alimentos se mantuvo por debajo del general hasta el mes de marzo. “En abril la tendencia cambió porque la cadena de valor del gran consumo no pudo seguir soportando el impacto de la escalada de los costes esenciales”, explicó, añadiendo que “los alimentos en sí mismos no se están encareciendo, lo hacen los insumos”.

Así, la subida de productos agrícolas, materiales de envases o suministros como la electricidad o el gas se han traducido en un incremento de “entre el 40% y el 70%” en los costes de producción de los alimentos. “En este contexto es inevitable la subida de precios; el sector no es culpable de la inflación, sino una víctima más del incremento de costes”, expuso González.