La Guardia Civil ha intervenido 9.585 jamones ibéricos no aptos para el consumo en una operación llevada a cabo en las provincias de Sevilla, Huelva, Badajoz, León, Gerona, Zaragoza y Valencia, que se ha saldado con la detención de 6 personas responsables de su preparación, comercialización y distribución. Los jamones, valorados en 1.185.000 euros, habían sido declarados no aptos para el consumo tras un incendio producido en un secadero de la localidad de Monesterio (Badajoz), pese a lo cual fueron recuperados para su comercialización ilegal por dos directivos de la empresa encargada de su destrucción.