Biodiversidad

Hallan evidencia de menopausia en chimpancés salvajes en Uganda

MADRID
SERVIMEDIA

Un equipo de investigadores ha encontrado evidencia de menopausia en chimpancés de Uganda que sobreviven mucho más allá del fin de su capacidad para reproducirse.

Así lo explican en un artículo publicado este jueves en la revista ‘Science’. Hasta ahora, algunas investigaciones apuntaron que solo los humanos y algunas especies de ballenas dentadas viven muchos años de vida activa tras la pérdida de la capacidad reproductiva, puesto que la gran mayoría de los mamíferos permanecen fértiles hasta el final de sus vidas.

En los seres humanos, la menopausia suele llegar a las mujeres entre los 45 y 55 años, y se caracteriza por una disminución natural de las hormonas reproductivas y un cese permanente de la función ovárica.

Explicar cómo evolucionó la menopausia es un desafío porque los beneficios evolutivos no son obvios. También sigue siendo incierto por qué está en los humanos, pero aparentemente en ningún otro primate longevo.

Sin embargo, Brian Wood, investigador de la Universidad de California en Los Ángeles (Estados Unidos) y el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva (Alemania), y sus colegas ofrecen una evidencia demográfica y hormonal de menopausia en chimpancés salvajes.

UN 20% DE LA EDAD ADULTA

Utilizando observaciones demográficas y de comportamiento de una comunidad de chimpancés de Ngogo estudiada durante mucho tiempo en el Parque Nacional Kibale (Uganda), los autores calcularon una métrica llamada representación posreproductiva (PrR), que es la proporción promedio de la vida adulta que se pasa en un estado posreproductivo.

Mientras que la mayoría de los mamíferos, incluidas otras poblaciones de chimpancés, tienen un PrR cercano a cero, los autores descubrieron que los chimpancés de Ngogo tenían un PrR de 0,2, lo que significa que, de media, las hembras viven un 20% de su edad adulta en un estado posreproductivo.

Además, muestras de orina de 66 hembras que diferían en estado reproductivo y edad mostraron que la transición a este estado posreproductivo estuvo marcada por cambios en hormonas como gonadotropinas, estrógenos y progestinas. Según los autores, variaciones hormonales similares son diagnósticas de la menopausia humana.

Sin embargo, a diferencia de los humanos, las chimpancés posreproductivas de la población de Ngogo no participaron en la crianza de los hijos de sus hijos, lo que sugiere que no se aplica la popular ‘hipótesis de la abuela’, que se ha utilizado para explicar la evolución adaptativa de largas vidas tras la etapa reproductiva.

(SERVIMEDIA)
26 Oct 2023
MGR/clc