A juicio de Aoiz, sería ideal para el PNV que "no se hablara de tragaperras, que no se hablara de las contrataciones a dedo, que no se hablara de los 'batzokis' (sedes sociales del PNV) como centros de enchufe, que no se hablara de los fondos reservados de Atutxa -que los tiene-, que no se hablara de Azpiegitura... Pero se va a hablar".

En una not, Aoiz afirma que el PNV es un partido ligado al PSOE, "por más que ahora quiera huir de la quema", y que "más tarde o más temprano se descubrirán los Rubio y Roldán del PNV".

Según la organización radical, el PNV "comparte con el PSOE la intención de parasitar la sociedad, ha hecho de las instituciones que gobierna un inmenso 'batzoki' y ha llegado el momento en que el PNV no podría vivir sin la corrupción y el enchufismo".

La promesa de los nacionalistas de no utilizar la corrupción en su campaa electoral tiene el objetivo, según Aoiz, de desviar la atención y evitar "que la sociedad vasca conozca su verdadera realidad y su participación en eso que se ha dado en llamar las cloacas del Estado".

En este sentido, Aoiz señala que el miedo a que el ex director de la Guardia Civil Luis Roldán hable no está únicamente en el Partido Socialista, sino también en el PNV, porque "tiene motivos para temer que este escándalo le salpique", ya que "está hasta el cuello".