Así se desprende del Observatorio Sectorial DBK de Informa, publicado este lunes, en el que se explica que tras la ralentización en 2020 motivada por el impacto de la crisis sanitaria de la covid-19, en 2021 el mercado se vio impulsado por la recuperación de una parte de la actividad que no pudo ser realizada en el ejercicio anterior y por el incremento de la demanda de tratamientos de salud mental. Asimismo, se registró un moderado incremento de las tarifas de algunos servicios.

Los ingresos de los centros privados no benéficos representaron en torno al 15% del gasto sanitario total de los hospitales de salud mental y tratamiento de toxicomanías, incluyendo tanto centros de titularidad pública como privada.

De cara al futuro, a corto y medio plazo el sector presenta unas “perspectivas favorables”, en un escenario de creciente demanda ante la mayor sensibilización de la población sobre la salud mental y el aumento del gasto sanitario.

“No obstante, el deterioro de la coyuntura económica, que previsiblemente dará lugar a una pérdida de capacidad de gasto de las familias, podría frenar el ritmo de crecimiento de la demanda a corto plazo en hospitales privados, desplazándose en cierta medida hacia hospitales públicos”, precisa el estudio.

92 HOSPITALES

El número total de hospitales de salud mental y tratamiento de toxicomanías se situaba en 92 a finales de 2021, los cuales contaban con algo más de 12.000 camas. Del total, 28 eran hospitales públicos y 64 correspondían a centros de carácter privado o pertenecientes a organizaciones no gubernamentales, siendo 36 de estos últimos centros privados no benéficos.

La estructura empresarial se caracteriza por una presencia mayoritaria de compañías de pequeño tamaño, gestoras habitualmente de un único centro, junto a las que coexiste un reducido número de grupos que gestionan dos o tres hospitales de salud mental.

Eso sí, Informa señala que en los últimos años la oferta ha venido registrando un proceso de concentración, con la adquisición y absorción de centros y empresas por parte de los principales grupos. De esta forma, las cinco primeras empresas gestoras de hospitales de salud mental y tratamientos de toxicomanías privados no benéficos reunieron en 2021 más de tres cuartas partes de la facturación total de este tipo de hospitales.