Esta recaudación se ha obtenido mediante la campaña Toallas para la vida y se entregará de forma íntegra a la ONG Orphanage.

La campaña consistía en la imposición del pago de un euro para aquellos clientes que decidiesen lavar a diario sus toallas de piscina y, según la dirección del hotel, su objetivo inicial era concienciar a sus huéspedes sobre la necesidad de ahorrar agua y evitar en la medida de lo posible verter productos contaminantes al planeta.

Para ello se colocaron informaciones en todas las habitaciones del hotel donde se explicaba que, "a pesar de que en Canarias el agua no sea un bien escaso, "lavando todos los días las toallas estamos ensuciando el medio ambiente".

De esta forma el hotel consiguió reducir su consumo de agua y, al mismo tiempo, recaudar dinero para proyectos solidarios, gracias a los clientes que insistían en el lavado diario.