En rueda de prensa, Ortiz dijo que las medidas aprobadas el pasado viernes por el Gobierno vienen a profundizar en el recorte de los derechos de los sectores más desfavorecidos, como mujeres, inmigrates, discapacitados, desempleados de larga duración y jóvenes.

Asimismo, el presidente del Consejo de la Juventud entiende que la forma en que el Ejecutivo ha procedido para poner en marcha la reforma, utilizando el Real Decreto-Ley, pone de manifiesto que el Gobierno nunca tuvo voluntad de negociar y dialogar con los agentes sociales.

Entre los puntos de la reforma que este organismo considera más lesivos, Ortiz señaló la definición que se hace de empleo adecuado y lo que se plantea como compromso de actividad. "De alguna manera se culpabiliza al trabajador de no querer trabajar cuando los datos que manejamos son otros bien distintos: un 40% de trabajadores desempleados no cobra ningún tipo de subsidio", explicó.

El Consejo de la Juventud no ve tampoco con buenos ojos el contrato de inserción, que afecta especialmente, subraya, a los jóvenes, y que aunque no aparece en la reforma, "nos consta que se tiene previsto que será elaborado en la Ley Básica de Empleo".

Ortiz se refirió tambiénla supresión de los salarios de tramitación e indicó, al respecto, que el hecho de que los trabajadores puedan ser despedidos de manera casi gratuita va a afectar directamente al sector joven, por estar ligado a contratos temporales.

Por todo ello, el Consejo de la Juventud estima que estas medidas van a producir una importante reducción del poder adquisitivo de una amplia capa de la sociedad que, a su juicio, resultará mucho más vulnerable y tendrá mayores riesgos de caer en la pobreza.

"Considramos que el abaratamiento del despido" remachó Ortiz, "no sólo diluye las diferencias entre el despido procedente y el improcedente, sino que traslada al trabajador despedido los costes económicos de una decisión adoptada por la empresa".

El Consejo de la Juventud pide al Gobierno que retire este bloque de medidas y advierte de que, en caso contrario, dicho organismo se vería obligado a apoyar y manifestarse a favor de las movilizaciones planteadas por los sindicatos. Ortiz abogó por restablecer el dálogo con los agentes sociales, procurando adoptar medidas que favorezcan principalmente a aquellos sectores sociales más desfavorecidos.

En este orden de cosas, la secretaria confederal de Juventud de CCOO, Purificación García, calificó la reforma de "vergonzosa y nefasta para la ciudadanía" y consideró que supone "un atrevimiento" acometerla al margen de los agentes sociales. "Una reforma de estas características está injustificada social y económicamente", apostilló.

En los mismos términos se anifestó Pilar Duce, su homóloga en UGT, quien remarcó que la reforma del Ejecutivo supone "una agresión muy fuerte a los trabajadores jóvenes", colectivo que cada vez va a tener menos capacidad adquisitiva, pero también al conjunto de la sociedad.