Los test podrían ser utilizados por las compañías aseguradoras y los empresarios para averiguar el comportamiento de sus trabajadores o asegurados y prever la evolución de su salud futura.

El doctor Arthur Hartz, promotor del estudio, cree que 10 pruebas de laboratorio muy comunes pueden identificar a un gran bebedor si se estudian todas juntas. Algunos de estos test miden el clruro, el sodio, la alta densidad de lipoproteínas y el nitrógeno de la urea sanguínea. Todos estos factores se ven afectados por la presencia del alcohol en la sangre.

El equipo de Hartz realizó 40 pruebas independientes en 426 pacientes que se autodescribían como "grandes bebedores" y 188 como "pequeños bebedores". Las 10 pruebas seleccionadas identificaron correctamente el 98% de los bebedores empedernidos y un 95 de los segundos.