Homs recordó que actualmente el precio de la gasolina está liberalizado, de forma que los operadores pueden fijarlo como deseen, y lo que se pretende con esta medida es que, sea cual sea el precio final que se fije, que el consumidor va a pagar igualmente, "la última peseta o las últimas pesetas vayan destinadas a un interés público".

El consejero catalán explicó en Radio Nacional que de lo que se trata es de que parte de lo que paga ya el cnsumidor se destine a financiar la sanidad, sin imponerle un recargo extra. "Por lo tanto, no estamos encareciendo más las cosas, sino que estamos redistribuyéndolas", agregó.

Tras recordar que la población española está envejeciendo, Homs indicó que una de las consecuencias de este proceso es un aumento de las necesidades de asistencia sanitaria, lo que tiene un coste adicional. "Hay que garantizar este servicio público gratuito, y hay que garantizar que sea gratuito en un futuro", añadió.

Francsc Homs rechazó utilizar, como vía para obtener los fondos necesarios para financiar la sanidad, el tramo del IRPF decidido a las autonomías. "El IRPF no debe incrementarse más", dijo. "Al contrario, el IRPF debe bajarse".