Por el contrario, los pagos realizados por los españoles que hicieron turismo en el extranjero ascendieron a 429.300 millones, 64.500 millones más que en el año precedente.

Como consecuencia, el saldo turístico experimentó un fuerte deterioro, al pasar de 1.559.500 millones de pesetas en 1989 a 1.391.100 millones el año pasado, lo que supone una caída de 168.500 millones.

El ministro de Economía, Carlos Solchaga, comentó hoy en una rueda de prensa convocada para hacer balance del año 90, que fue un ejercicio positivo a pesar de lo que calificó de "caída en picado" de los ingresos por turismo.

Por otra parte, el empeoramiento de la balanza turística explica la mayorparte del deterioro de la balanza por cuenta corriente, cuyo déficit pasó de 1.367.600 a 1.592.000 millones de pesetas entre 1989 y 1990.