Mrabet destacó que "mientras las relaciones entre España y Marrucos estén congeladas, y ahora están más congeladas que nunca, seguiremos engordando la lista (de muertes)".

El presidente de ATIME comentó que la solución a la inmigración clandestina, que provoca estas muertes, no sólo depende únicamente de España o de Marruecos, sino de "la conjugación de muchos factores, que no sean sólo los policiales".

En este sentido, señaló que el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) contribuye a salvar vidas, "pero para el control de las fronteras no sirve, ni a a servir".

Además, Mrabet resaltó que Marruecos "tiene dificultades para controlar bien sus costas, son muchos miles de kilómetros de costa y no tienen medios".

Por todas estas cuestiones, concluyó, "somos muy pesimistas respecto al desarrollo de los acontecimientos y se va a seguir sumando más gente" a esta tragedia.